Isabel Salas

Me tocas, me miras,  me comes,  me bebes. Me respiras. Me besas, me tienes, me arrullas, y a veces me hieres. Me hueles...

Todos deberíamos saberlo, pero casi nunca somos informados a tiempo de las cosas realmente importantes. Una de ellas es que las piedras ...

Otros traen las manos en los bolsillos, caramelos o monedas. Algunos traen facturas del pasado, cicatrices dobladas entre los pa...

Allí,  dentro del kaos interno que todos somos,  en medio del desorden de ruidos y lamentos, al lado de los gritos infernales de la...

Así como el cabello, las riendas de sujetar por dentro, se sueltan. Se desbocan las penas  y a desconsuelo suelto.  lloramos. ...

Me gusta mirar a los ojos que saben mirar a los ojos y tocar manos que saben tocar manos.  Bailar con gente que adora bailar y reír j...

Construiste un castillo  en las nubes,  lleno de torreones, almenas, puentes levadizos, promesas y murallas protectoras. Precioso...

Antimeter  sin golpear. Desfallecer. Arrinconar sin esperar. Antisocial, antihumedad, antesdeayer. Redescubrir  la ...