Hace horas que no respiras.
Te falto yo.
Ese aire puro que cambiaste por perfume.
Morirás perfumado.
Ahogado por exceso de esencias estrambóticas.
Serás el muerto más sofisticado del cementerio.
Muy elegante, pero muy muerto.
Parece que sin aire hay cosas que se ahogan.
Y tú , sin respirar, te mueres.
Isabel Salas