sábado, 11 de septiembre de 2021

TODO LO QUE PASÓ






































Todo lo que pasó
pasó para poder pasar ahora
lo que está pasando.

Cada beso que te dieron o que diste.

Cada abrazo que perdiste.
Todos tus amores y los míos.
Cada lágrima llorada 
cada insulto, cada golpe,
cada caricia enamorada.

Todas las heridas con que heriste
o te hirieron,
herí o me hirieron.

Todos los sueños y esperanzas 
que salieron a comprar tabaco
y no volvieron.

Todo eso que pasó, que me pasó,
que te pasó,
que nos pasó por separado
sirve para intentar  ahora 
que las próximas cosas
te pasen a mi lado.

Voy de frente.
Sin trucos.
Con todas mis heridas, y  agujeros, 
mis golpes,
mis caídas antiguas  y mis nuevos deseos.
Con miles de  caricias atragantadas
y varios kilos 
de esperanzas resucitadas.

Estuve calibrando el tamaño del daño
del miedo de sufrir 
que ambos tenemos.

Pensé bastante rato 
y concluí
mirando el puto lado positivo
que tanto adoran 
los cabrones emocionalmente equilibrados,
que si es para sufrir,
ya nos pilla entrenados. 

Y si es para salir un gran amor
de todo este pasado 
tan lleno de desastres,
que sea cuanto antes.

Que sea bienvenido 
y dure lo que dure.
Como dice mi amigo Carlos Emiliano
si es para ser, que sea para mucho 
y no para un poquito
y para eso
mejor es agarrarse los huevos
 un tantito. 

Isabel Salas