Durante esta última semana, alguien ha entrado trece veces desde Ucrania, (supongo que es la misma persona que ha entrado varias veces, ya que sería aún más extraordinario que trece diferentes ucranianos hubieran entrado a leerme).
Recuerdo que en el cole aprendí algo sobre la fertilidad de las tierras ucranianas, y que gracias a ello, en algún momento de la historia, Ucrania fue considerada el granero de Europa. Me llamó mucho la atención ese dato y hasta hoy lo recuerdo, como eso de que Mesopotamia significa tierra entre ríos o que la macedonia de frutas nada tiene que ver con Alejandro Magno aunque él era el rey de aquel lugar. Con más de cincuenta años, confundo a veces los datos y los hechos que hace tanto tiempo aprendí, pero hoy, fue lo primero que me vino a la cabeza cuando vi en las estadísticas del Blog las visitas que habían entrado desde allá, caramba, el granero de Europa.
Una entrada podría ser accidental, algo puramente fortuito, pero trece significan que alguien estuvo interesado y paseando entre las publicaciones un buen rato, y eso siempre me emociona mucho. Después de cinco años y cuatro meses de vida bloguera aún disfruto como algo extraordinario que personas de tan diferentes lugares entren cada semana a leer mis poemas, mis cuentos y las cosas que publico.
No sé si eres un hispanohablante que vive por allá, un ucraniano que estudia español o alguien que vivió en Sudamérica. Sea como sea quiero desearte feliz año y agradecerte tus visitas. Justo ayer se cayó el avión ucraniano con ciento setenta y seis personas en Irán. Los investigadores intentan averiguar cómo sucedió el accidente, (si es que fue accidente) y los que alguna vez viajamos en avión, imaginamos por un momento cómo debieron ser los últimos minutos de esos pasajeros y sentimos el corazón apretado.
El contraste entre la belleza de la poesía y la terrible realidad del accidente, entre mi alegría por tus visitas y la tristeza por los fallecidos y sus seres queridos, me hizo escribirte este post. Es, al mismo tiempo, un saludo y un sentido pésame, una celebración de la vida y un adiós a los que perdieron su vida ayer.
Es también un convite para que vuelvas siempre y una manera de expresarte el deseo sincero de que, al saber que noté tu presencia, te sientas abrazado o abrazada. No nos conocemos pero tú me lees y yo recibo las notificaciones del blog que me hablan de tus visitas, nunca hemos hablado pero sí nos hemos comunicado. Mi impulso fue escribirte hoy estas palabras y con sinceridad, espero que te sientas tocado por ellas.
Un gran abrazo
Isabel💜